- Primero, extraemos el gasoil en buen estado y lo almacenamos en un depósito externo.
- Posteriormente, eliminamos los lodos contaminados del fondo, despegándolos con agua a presión de hasta 3 000 bar y aspirándolos.
- Utilizamos productos especiales para extraer el resto de sedimentos acumulados en las paredes.
- Almacenamos cuidadosamente los restos de contaminantes para su correcto transporte y tratamiento como residuos peligrosos.
- Una vez limpio, lo secamos y traspasamos el combustible separado con anterioridad.
- Finalmente, solo quedará pegar la etiqueta actualizada para llevar un seguimiento correcto de la limpieza de tanques de gasoil.
En el caso de los depósitos metálicos, es indispensable llevar a cabo este tipo de mantenimientos de forma mucho más regular que en los de plástico, puesto que cuentan con la desventaja de oxidarse y propiciar la acumulación de residuos no deseados.
Si está interesado en contratar nuestros
servicios de
limpieza de tanques de gasoil, no dude en ponerse en contacto con nosotros. Le realizaremos un presupuesto a medida de forma totalmente gratuita.